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Monje probablemente nacido en Cañas, en la Rioja alta. Vivió como pastor de joven, estudió luego y se ordenó como sacerdote, ejerciendo el sacerdocio en su aldea natal. Se hizo ermitaño y originó un monasterio prospero del que fue abad bajo la regla de San Benito en San Millán de la Cogolla.
Huyó del monasterio, entonces Reino de Navarra, por las amenazas del Rey García a quien no satisfizo en sus demandas de apropiación de los bienes monacales.
Protegido por Fernando I, rey de Castilla, se dedica a la restauración de un viejo monasterio, en San Sebastián de Silos, en el valle de Tabladillo, en el lugar que lleva hoy su nombre, en las estribaciones de la sierra de la Demanda.
El tal monasterio es hermoso monumento de arte románico, resaltando entre sus maravillosas producciones el claustro en el que brillan los capiteles y los fustes de sus columnas, catequesis inigualable escrita en piedra con ideas de cielo y convertida en uno de los mejores poemas ofrecidos a través del arte.
El monasterio de Santo Domingo de Silos, arruinado durante la desamortización, sigue siendo lugar de plegaria y meditación.
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